Visita al medico

Salió de detrás de una cortina luego de cambiarse. Ya era pasada la madrugada. A esa hora la mayoría dormía o simplemente atendían en otra parte del hospital. Por su parte recién llegaba de su otro trabajo. Como siempre pocas horas de descanso...

-" Hola "- Saluda con una ligera sonrisa. Su cabello iba atado con una coleta y llevaba unos lentes para descansar la vista. -" Oh... estas sangrando un poco "- Dice con un gesto serio pero comprensivo. -" Déjame ver, siéntate allí "- Indica para que se acomode en la camilla del consultorio. -" ¿Qué te sucedió? "- Pregunta entonces, cogiendo como siempre sus guantes de goma descartables.

¿Tenía rostro familiar? No sabía si era sensación suya, pero creía conocer al muchacho de algún lado...

Que bueno que tenía un autocontrol admirable. Cualquier hombre en su situación se hubiera puesto tenso al ver como el menor abría las piernas tan sumisamente...

-" No parece muy grave, pero tendré que limpiarla un poco. Por suerte no habrá que coser "- Dice entonces, ignorando que también le observaba como si le conociera de algun sitio. Seguramente ambos se habían cruzado en el prostíbulo, sin embargo no habrían cruzado palabra alguna.

Caminó para coger las cosas necesarias para la herida y regresa, colocándolas a un costado suyo. De inmediato toma algo de gasa y agua oxigenada para limpiarle con sumo cuidado. Acerca una silla y se sienta frente a sus piernas, o mejor dicho entre medio de estas. Una de sus manos se coloca en la parte superior de la pierna para sostenerse, mientras que la otra comienza a limpiarle con sumo cuidado.

Definitivamente la imagen no podía ser más morbosa... La cercanía de su rostro a su entrepierna era muy tentadora, pero él estaba concentrado en sanarle esa cortada. -" Dime si te duele o arde "-

Notó aquel ligero movimiento, pero era normal para alguien lastimado, no siempre es agradable que limpien una herdia abierta, el ardor es molesto; incluso había veces en que la mayoría se desmayaba por la impresión.

-" Tranquilo, ya acabé de limpiar "- Dice sonriéndole con amabilidad.

Sopla un poco para que no arda y masajea con delicadeza la zona de su muslo. Es sólo para no se tensara tanto. Se notaba sin duda nervioso. Por su parte era inevitable no darse cuenta, después de todo, su tacto estaba muy sensibilizado por ser cirujano. Toda tensión en los músculos eran causa de nerviosismo o estrés. En este caso lo primero. -" ¿Mejor? "- Le mira, desde abajo, tratando de ignorar un poco aquellos 'tiernos' gestos que el joven hacía.

Finalmente le coloca la gasa junto con cinta para cubrir la cortadura. -" Listo "- Le acaricia una vez con suavidad, y se coloca de pie para sacarse los guantes. Al acercarse y mover la silla palpa su cabeza, pero le mira inquisidoramente. -" No nos conocemos ¿Verdad? "- Pregunta entrecerrando la mirada y acerca su rostro al suyo como para inspeccionarle bien.

La serenidad es lo que caracteriza a Zen, realmente le es curioso como la gran mayoría de los pacientes se pone nervioso cuando él les atiende. No lo comprende, pero se alegra cuando estos se retiran ya menos tensos y por decirlo de alguna forma 'reparados'.

-" ¿Por qué tan nervioso Alessandro? "- Le pregunta mientras alza un poco sus cejas, sin perder por supuesto su gesto tranquilo, serio. -" Creo haberte visto en algun lado... sólo que no recuerdo dónde "- Murmura ladeando su rostro para picarle con suavidad la nariz con un dedo. -" Por tu ropa diría algo, pero no quisiera arriesgarme a ello "- Dice entonces, dandose la vuelta para dejar las cosas usadas en un tacho. Al regresar vuelve a observarle, allí, todo rojito y aun...

-" Hm... puedes cerrar las piernas precioso "- Ríe suavemente por aquel dulce detalle. Increible que hubiera muchachos así en aquella ciudad tan particular. -" Soy el Doctor Zen. Y por cierto... ¿Cómo te hiciste eso? Es muy tarde como para andar lastimandose ¿Sabes? ¿Trabajas a estas horas? "-

Se acomoda a un lado suyo mientras que le observa atentamente. ¿Por qué tanto nerviosismo? A este punto creía que el chico sangraría por la nariz al estar tan rojo. Le era cómico, pero a su vez procuraba solamente sonreír con levedad. Su turno recién comenzaba, pero definitivamente estaba agotado. Realmente quería algo que relajara su cuerpo, o por lo menos dormir unas cuantas horas seguidas...

-" Oh... "- ¿Se sonroja? Bueno, un poco, pero es por la verguenza quizás de saber que ambos trabajan en el mismo sitio... -" Quizás por eso he creido verte "- Comenta con una sonrisa leve, se siente incómodo al hablar de aquel lugar. No le agrada saber que había menores allí... Pues, era menor... ¿Verdad? -" Después de todo yo también acabo de salir de allí "- Dice entonces, pero coloca un dedo sobre sus labios para evitar que hablara. -" Sh... es un secreto "- Y sonrie, un poco más calmo.

-" Supongo que también has terminado tu horario... Es dificil trabajar allí, pero bueno, es la necesidad... "- Y suspira, sin poder evitar tener un gesto paternal y acariciarle los cabellos luego de quitar su dedo de esos rosaditos labios.

-" Larga noche es poco... "- Dice echando su cabeza hacia atrás mientras le escucha hablar. -" ¿Masaje? No sé si sea una buena idea... Mi cuerpo está tan agotado que si me relajo, seguramente caeré muerto bajo tus manos "- Bueno, no es que fuera a matarle, pero teme relajarse mucho y acabar por dormirse. Aunque estando tenso tampoco le hacía muy bien que digamos, tendría que buscar una forma de mantenerse despierto para sobrevivir la madrugada.

-" Aunque muero por uno también... "- Acota luego de acomodarse otra vez. -" ¿En que otras cosas eres bueno? "- Ops... pregunta equivocada, ésta iba con doble sentido. Pero no era raro que su cerebro no cordinase bien. Y aunque no se le notase en el rostro, iba muy cansado.

(Me retiro, será hasta mañana ^^, estaré tempranito por aquí *º*, saludos!)

Se puso de pie de un pequeño saltito sonriendo

-Oh vamos!!... te apuesto lo que quieras a que te encantara!!...- dijo mientras tomaba al doctor de la mano, conocia bastante bien la estructura de un hospital... sabia que detras de las cortinas que habia esuchado hacia un rato, tenia que estar una de las camillas altas para revisiones... y si, bingo... la habia...

-Recuestate... te prometo que sera bueno... tomalo como pago por curarme...- añadio mientras iba a la puerta y la cerraba... si lo que le preocupaba al doctor es que pdieran verlo tomando un masaje sus colegas, eso tenia sencilla solucion... se sentia mas en confianza al saber que el doctor era como él... de dia curaba, de noche vendia placer...

Se acerco nuevamente al mayor sonriendo

-Y... soy muuy bueno en muchas otras cosas... dejar el cuerpo agotado, dejarlo relajado... jaja... lo normal... entonces... me dejaras mostrarte... cierto?...- pregunto sonriendole con una cara tierna

(hasta luego ^^)

Ah... quisiera tener aquellas energías y ánimos para trabajar. Pero sentía que cada día se volvía cada vez más viejo. Si tan sólo hacer cirugías no costara tanta concentración y tiempo... o por lo menos no tuviera que trabajar en aquel otro lugar, su vida sería un poco más dinámica. Y no es que no lo fuera, sino que internamente se sentía exhausto.

-" Jejeje... No digo que no seas bueno. Sólo no quiero dormirme ¿Comprendes? "- Comenta mientras se deja llevar hasta la otra camilla mientras que el otro cierra la puerta para no ¿Preocuparle? Bueno, no le interesaba mucho lo que el resto de los internos dijeran, después de todo la mayoría sabía que trabajaba horas extras al ser pocos los cirujanos en el lugar.

-" Bueno, hasta que no me llamen para alguna cirugía creo que estará bien "- Sonríe un poco y se recuesta sobre aquel sitio, ladeando el rostro para ver al jovencito. -" Aunque por ahora prefiero lo de relajación, quizás agotamiento para otro día ¿Que te parece? "- Por supuesto, es una broma, no le parece correcto encamarse con un 'compañero' de trabajo, aunque a decir verdad ya lo ha hecho ciento de veces por morbo de los clientes...

-" Mmm... es verdad. "- Se notaba andaba algo atontado por el cansancio, pero bueno, eso se quitaría con una buena taza de café y quizás un energizante, sino caería muerto sin duda por algún lado.

Se volvió acomodar sentado en la camilla para quitarse la bata y luego la camisa que llevaba por debajo, además de por supuesto la camisa. Ya estando con el pecho libre se recuesta una vez más, recogiendo en un costado su larga cabellera para dejar libre su espalda. No importaba si veía aquella larga y profunda cicatriz que tenía allí, era ya bastante vieja, o sea estaba acostumbrado a que la vieran, en especial si era algún cliente del prostíbulo.

-" Hm... cuando gustes "- Quizás estaba mal que le tomara tanta confianza, pero al saber que ambos trabajan en el mismo sitio le hizo sentir mínima mente conectado con el otro.

Por su parte también sintió un incómodo escalofrío, pero siendo por que el otro pasó sus dedos por aquella cicatriz. De más está decir que esa zona estaba muy sensibilizada por la piel nueva que se había formado.

-" Hn... ¿Estas seguro de poder mantenerme despierto? "- Bromea a la par que gime a penas en cuanto el otro comienza a masajear sus hombros. En verdad estaban tensos, los nudos seguramente debían de ser muchos pues hace tiempo los iba acumulando noche tras noche sin descanso alguno. -" Ah... el trabajo me requiere mucho, no es facil ser uno de los pocos cirujanos del hospital "- Comenta, cerrando los ojos mientras que se queja un poco, no de dolor, sino de como le relaja de a poco su espalda.

-" Mmm.... ah... Dios... sí que necesitaba esto "- Murmura mientras trata de resistir el sueño. Sus musculos destensados se relajan tanto que le da un sueño terrible. Lo que daría por poder dormirse allí mismo, pero no podía, tenía que ser responsable. Aunque si seguía así de pronto se vería dormido sin duda alguna.

Las manos del muchacho recorrían tan sutilmente su dorso que su cuerpo parecía estremecerse de vez en cuando. -" Sí que eres bueno "- Le halaga a la par que entreabre a penas los ojos e intenta mirarle. Nota aun aquel leve sonrojo en sus mejillas, pero no pregunta nada al respecto.

-" Si dijera que no estaría mintiendo, pero sí es increible, siempre te empeñas en lograr salvar a la persona que atiendes, sea una herida mínima o restauración, todo sea por su bien... "- Susurra. Y de pronto la memoria le ataca haciendole recordar a su pequeña hermana. Si hubiera sabido qué hacer en aquel momento seguramente no habría muerto... Pero nadie podía culparle de lo sucedido, no era su culpa por más que se martirie por ese hecho.

-" Creo que nadie debería trabajar en un prostibulo Alessandro... Ni tú, ni yo... ¿Por qué estas allí? "- Cuestiona para despabilarse un poco. Es tanta la relajación que no es raro sentir cierta presión en la zona baja de su cuerpo.

Ah... no podía más, se dormiría en cualquier momento. Sus hombros por fin descubrieron lo que era el descanso, o mejor dicho la relajación. Estaba tan tenso que verse masajeado había sido directamente una gran bendición. ¿El destino tendría algo que ver? Ultimamente no estaba seguro de sobrevivir a las horas de trabajo, aunque seguía haciendolo como un muñeco a baterías, sin poder reprochar...

-" ¿Hmm? Ah... Claro que puedes, creo que te será más cómodo "- Murmura y suspira largamente antes de dejar que se suba a la camilla.

-" Yo también estoy por el dinero... Es irónico que no me alcanse si trabajo aquí, pero la verdad no alcansa "- Comenta con un tono nostálgico en la voz. Pero no se pondrá triste, hace tiempo trabaja allí, está acostumbrado. -" Ah... continua por favor "- Pide y cierra una vez más los ojos.

-" ¡Ah! Aw.... ah... así uh... "- Bueno, la otra parte de su espalda también estaba tensa, y no era raro escuchar esos sonidos proveniente de sus labios. Aunque sí, procuraba no exclamar mucho, no quería llamar la atención fuera del consultorio. Parecían gemidos 'raros' más que de relajación, pero bueno, había que entenderlo, estaba estresado... (XD)

-" Eso es cierto "- Murmura suspirando, relajando más su espalda. Su trasero de vez en cuando se movía al sentirse un tanto molesto con su parte baja. O mejor dicho, su entrepierna que parecía algo despierta. Es que bueno, no todos los días un muchacho como el que tenía encima le daba masajes tan exquisitos. -" Mmm... Sí, me gusta mucho "- Y no es que estuviera cachondo, sólo estaba relajado, mucho. -" Sigue así "-