Maldita espera...

- Tan impaciente como siempre. No todos tienen el mismo estilo de vida que tú cariño... jejeje... -


Apoyado en el marco de la puerta, hizo su aparición el de cabellos blancos y ojos carmín. Fumaba un cigarro corriente sin filtro mientras sus labios mostraban una sonrisa soberbia. Luego de unos segundos, apagó la colilla húmeda con su saliva y se acercó para sentarse sobre la mesa mirando sobre un costado de su hombro, a quién se encontraba en aquella habitación. Le miró los oscuros cabellos y jugó con ellos entrelazándolos en sus dedos de manera sutil...


- Fue un viaje muy largo hasta aquí... espero que todo esté según lo planeado... -

- no soy un hombre paciente y mas cuando es de negocios-

murmuraba cuando se colocaba firme, sus piernas de nuevo tocaban el suelo, sus manos se enredaban en su cabello en el momento que cruzaba los brazos, sus cabellos se movian segun el viento que hiciera, a la par de sus dedos, mientras cogia el movil y antes de que sonara la voz bramaba

-que nadie me moleste-

luego de colgar dejó el movil caer de nuevo en su bolsillo, colocando sus dedos en su menton de forma seductora, una sonrisa se acariciaba en sus labios al verle fumar, hizo señales con el dedo, para que se acercara, mientras murmuraba

-no se te olvide de hechar el cerrojo, tenemos asuntos importantes y no quiero que nos jodan sin mi permiso-

- Jejeje ¿Por quién me tomas?... ¿Crees que dejaría las cosas hechas a medias? Puertas cerradas y sin posibilidad de abrirse, además... -


Mostró una sonrisa maliciosa, aquel sonrojo en sus mejillas hizo notar algo de soberbia en su actuar. Se acercó nuevamente, levantándose de la mesa y rodeando con sus brazos, la cintura contraria, deleitándose con su aroma y queriendo que esos labios tan sensibles, se posaran en los propios ya no resistiendo el deseo de besarse...


- ... No te olvides de mi trabajito secreto... si alguien viniera a interrumpirnos, con una simple inyección de mi parte estarían pasando a mejor vida... jejeje... -

-Mythos, Mythos, el mismo que cautiva mi corazón con cada palabra-

su boca se abria en un deseo se besarle. ambos aliento se fundian mientras una sonrisa se jugaba en el rostro mordiendo su labio inferior, a pesar de que él tenia sus manos en su cintura, el colocaba las manos a ambos lados de su cuerpo, apretandolas en lamesa, finalmente arrebatando el cigarrillo que habia despojado mythos, lo metia en su boca, hechaba el humo hacia arriba, para colocar sus dedos en el primer boton de su camisa

-no fumes esta mierda, fuma los mentolados, te matará igual pero con sabor-

su voz era brusca mirandole a los ojos, moviendo el cigarrillo de manera que una sonrisa maliciosa marcase elcompas de sus caricias, sacando una navaja de tamaño medio de su bolsillo, arrancando algunos botones de la camisa del otro, ronroneando

-asi me gusta más-

- Jejeje... Anota en tu agenda que me debes una camisa, por el momento... vamos a ver que valga la pena... -


Acercó la mano del contrario con el cuchillo y se produjo en su propio pecho una delicada línea de sangre. Lamió las pequeñas gotas que cayeron del frío metal sin dejar de mirarle a los ojos.
Volvió a besarle para que sintiera el placer de ambas bocas, mezcladas con el líquido carmín... acto seguido... le observó lujurioso con los labios manchados de su propia sangre...


- Ven... termina de limpiar lo que queda... -

-desde cuando se supone que me tienes que dar ordenes-

su voz era fría pero melodiosa en un tono seductor pero firme, su boca lamía el angosto placer de sentir la sangre de aquella persona correr por sus labios, apretaba las manos en la madera de la mesa, para logar que su cuchillo, ahondara en cada uno de los digitos de nergal, la sangre, como siempre pecaminosa y ruidosa llenaba el pecho del hombre, ronroneando de forma suave para morder su pezon derecho con fuerza, recorriendo finalmente con sus dedos aquella herida que se habia causado con el cuchillo, pasando su lengua, ahondandola, sintiendo el placer de la sangre mientras lo mantenia arrinconado

- Aaaah... ¿D-desde cuando?... Tal vez, desde que te volviste algo lento mi amor... -


En un movimiento ágil se volteó dejándo al de cabellos oscuros arrinconado contra la pared. Tomó el cuchillo y con gracia, desgarró la camisa y los pantalones del contrario, notando con malicia, una erección en ascenso por parte de Nergal.


- Jeje... Deberías agradecerme. De seguro en aquellos pantalones ya se estaba volviendo dolorosa... -


Le acarició con fuerza demostrando su perversión, más en sus ojos, había algo que no había cambiado... aparecían las nostalgias breves de una época en donde no era necesario llegar a tales extremos...

-lento?-

tomó los cabellos del peliblanco mordiendo casi con violencia su mentón dejando la marca de sus dientes, no soltaba los cabellos dirigiendo su mirada hacia el mientras subia su rostro y su nariz junto con la de el mirandole a los ojos, con un golpe certero arrinconó de nuevo el cuerpo del peliblanco, de espaldas, apegandole contra la ventana mientras su erección iba acariciando lo que era suyo

-no vuelvas a decir eso si quieres conservar tu adorado trasero, cariño-

- Jejeje... Se ve que te han tocado fuertes mis palabras... ¿Qué no sabes que las palabras se las lleva el viento, my honey?... -


Le mordió el cuello con fuerza, aquella misma que había sido aplicada en su menton segundos atrás y que había dejado marcas de guerra. Luego con su mano, apretó el trasero del contrario obligándole a dejar escapar unos cuantos gemidos y volvía a acorralarle contra la pared.


- Mmm... veamos... analicemos este cuerpo... -


Lamió sus pezones y posteriomente su estómago para bajar lentamente hasta donde se encontraba su miembro. Le quitó la ropa interior y comenzó a jugar con la punta de aquella erección.

-Darling..me encanta como conoces mis deseos-

una risa atronadora salia de sus labios acariciando con brusquedad sus cabellos, dirigio una mirada hacia su querido medico, el unico que le comprendia de forma que a veces le asustaba pensarlo, arqueaba asi su espalda notando la pequeña gota que salia de su cuello, debido a la mordida, sus dedos bajaron por su espalda y arañaron la espalda del medico, cerrando los ojos, se mordia sus labios ante aquellos mordidas en sus pezones, estos se endurecieron de tal forma que no daba lugar a dudas de la exitacion que estaba sufriendo su cuerpo, con mythos habia pasado la mitad de su vida y gracias a el en muchas ocasiones aun seguia vivo, una sonrisa salia de sus labios cuando sus jadeos le inundaban, apretando su trasero

-vamos ah quieres bajar de una puñetera vez ah me estas matando ah-

- Mmm parece que aquí tendremos que aplicar algo de succión para que baje la hinchazón, Mi Nergal querido... -


Se arrodilló para finalmente, meter el miembro contrario en su boca y disfrutarlo como si se tratase de un caramelo. Succionaba con fuerza y deseo al momento que con sus dedos, acariciaba delicadamente la entrada del de cabellos oscuros. Cómo le gustaba verle asi de excitado por su causa... extrañaba esa mirada acuosa y sonrojada en el rostro de SU Nergal....


- Mmm... vamos... demuéstrame que tus signos vitales están bien cariño... reacciona jeje... -


Metió uno de los dedos en su entrada.

tapó sus ojos con el dorso de la mano mientras su boca se mantenia abierta, varios jadeos y gemidos salian de sus labios, finalmente su mirada se centraba en como SU mythos estaba succionando su ereccion, esta, cada vez mas grande, hasta alcanzar el punto álgido, sus manos apretaban con fuerza sus cabellos teniendo que apoyarse en la pared, su entrada aun se notaba muy apretada de tanto tiempo que no lo habia conseguido hacer con su medico, se mordia los labios

-Joder ah-

de nuevo tapó sus ojos con las manos, notando su exitamiento, sus mejillas sonrojadas, su boca completamente abierta por vez primera sumiso ante las caricias de él, se mordia los labios mientras iba cayendo por la pared, quedando completamente sentado, pero con las piernas separadas, colocando las manos en sus cabellos mientras su pelvis se movia de forma fuerte, mordiendose los labios

-ah dios mythos-

Conforme pasaban los minutos, iba aumentando más y más la velocidad e intensidad de las succiones. Notó como aún se encontraba muy estrecho para un segundo dedo y sacó el que ya estaba para no provocarle daño, no quería lastimarle en absoluto, después de todo... amaba con locura a ese hombre a su lado, daría la vida una y mil veces por verle sonreír un instante que fuera y en aquellos momentos, solo quería hacerle sentir bien. Acarició ahora con su mano libre, los testículos de SU Nergal mientras no dejaba de mirarle con aquella intensidad cálida en sus ojos... como diciendo un te amo en cada gemido que le provocaba al contrario...


Te amo mi Nergal... como no tienes ni idea...

-cerró los ojos para alzarle con violencia no sin antes separarle de su miembro y sus testiculos, su boca reclamaba la boca de mythos, jadeando, su lengua batallaba por entrar en la boca de SU medico, apretando sus nalgas sn mucha fuerza, en el momento que se sonrojaba mirandole a los ojos, le miraba de forma fija, penetrante, para colocar en alto sus caderas y su trasero, al igual que sus manos en el suelo y su mejilla apegada al suelo, instandole a que le hiciera suyo de una vez-

-my-chaaan...-

Le miró con la respiración agitada, aquella pose en SU psicólogo le calentó bastante. Se acercó para dilatar un poco más su entrada con la lengua, introduciéndola en su interior por unos momentos. Finalmente bajó sus ropas inferiores y en un movimiento suave y a la vez excitante, penetró al de cabellos oscuros, arqueando levemente la espalda y dejando escapar un pausado gemido. Comenzó a moverse de forma lenta en un principio para luego ir aumentando la velocidad y fuerza de las estocadas. Jadeaba mientra se apegaba a Nergal, abrazándole por la cintura, lamiendo su espalda y a momentos dando suaves mordisquitos en su oreja....


- Aaaah Aaaah... estás... tan estrecho mi amorr.... Aaaah!... -

- mmhggg¡¡ -

pocas veces nergal dejaba que sus sentimientos y sus gemidos salian todo el rato, por primera vez sus mejillas se sonrojaban, jadeaba, colocaba sus dedos en su boca mordiendose los labios sin dejar de moverse, sus caderas, en el minimo momento de su lengua, le hacia gemir, daba gracias a que la sala de reuniones estaba insonorizada para que nadie del exterior escuchaba nada, apretaba el suelo arañando la madera, mientras alzaba sus caderas, moviendose de manera seductora y sumisa, abria finalmente los ojos al igual que su boca, que dejaba caer su saliva por la madera, era su primera vez despues de mucho tiempo, viendose algunos hilos de sangre en su entrada murmurando

- sigue, sigue ahh -

- Aaaahhh estás ardiendo amor... siento que voy a derretirme allí dentro... Aaaah!... -


Notó algo preocupado, el hilo de sangre que caía por las piernas del contrario y comenzó a suavisar un poco el ritmo para que se acostumbrase a recibirlo. Le besó la espalda con suavidad para luego, salir de su interior y cambiar de pose. Lo colocó boca arriba en el suelo y volvió a penetrarle estando frente a sus ojos mirándole con ternura. Le besaba para que le mordiera los labios conforme aumentaban las estocadas. Tomo sus manos y las entrelazó con las suyas para que sus uñas no se lastimaran con la madera.


- Mi niño... ¿Estás bien?... No quiero hacerte daño... -

- Es-estoy bien -

en aquella postura podia notar su placer colmarse, su miembro ya erecto acariciaba la madera, mojando la punta de su miembro, cuando cerró los ojos los tenía que abrir nuevamente, mirandole a los ojos apretando de pronto sus dedos al sentir que cuando de nuevo le penetraba un nuevo hilo de sangre salia de su ano, pero ya la ultima, siendo el placer lo que sustituyera el dolor, le miraba a los ojos abriendo su boca aun humeda para responderle a sus besos, sonriendo ladeando el rostro, moviendo su lengua en su boca sin importarle la humedad y la saliva que le llenaba

Le besó con ternura para seguir moviéndose esta vez un poco más rápido. El cuerpo le quemaba con fuerza, sintiendo conforme se movía, que el climax absoluto llegaría en poco tiempo.


- Aaaaahhh Aaaah... ¿E-estás listo?... Aaaaahh... voy a llenarte de mi, caariñoo... Aaaah... -


Jadeaba fuertemente, moviéndose con fuerza. Sujetaba ambas manos del contrario sobre la cabeza para acorralarle y tenerlo bajo sus dominios. Finalmente gimió más fuerte para dejar salir el líquido blanquecino y depositarlo en el interior de SU psicólogo. Arqueó su espalda nuevamente mientras su respiración entrecortada, se acallaba entre besos apasionados...

[ uwu my-chan...ne-chan ya no es un psicologo xDD -3- rico]

un jadeo envolvía sus labios cuando sus piernas se obligaban a rozar contra su pecho debido a la postura, mientras sus talones se apoyaban en los hombros de su medico jadeaba en su oido, apretaba su espalda en el momento que no podia decir nada mas que seguir siendo sumiso bajo las ordenes de su medico, sus mejillas se sonrojaron mientras su boca seabrio dando a revelar un gran gemido cuando su semen por igual caia pr su pecho y por su vientre y su entrada se llenaba de una mezcla de sangre dinal con algunos restos del semen de su medico

-Ahh..mythos joder-

Le sujeto entre sus brazos con cariño al momento que sacaba lentamente, su miembro del interior de SU amado. Le miró con cariño y acarició sus cabellos para besarle posteriormente con gran ternura. Le abrazaba sin soltarle y sonreia cálidamente para pronunciar en voz baja...


- Te amo... Ne-Chan... -


Permaneció tranquilo, deleitándose con el aroma contrario. Su esencia dulce y a la vez, masculina... extrañaba tanto esa sensación que sólo podía provocarle su Nergal. Volvió a sonreirle para desordenar sus cabellos en un gesto afectuoso y casi paternal...


- Me quedaré a tu lado para siempre... te lo prometo... -

- my-chan -

un suspiro hacia a sus labios abrirse ya que nadie le hacia sentirte tan debil pero a la vez tan fuerte como mythos, le miraba a los ojos cual niño sumiso mientras cerraba los ojos nuevamente abrazandole por la cintura al oir sus palabras, cerrando los ojos mientras ambos cuerpos permanecían desnudos y a la vez sudados, mirandole a los ojos volvia a subir sus labios a su menton y a su boca, besandola, arremetiendo contra ella pero con pasion y ternura mientras sonreia de forma timida colocando las manos en su boca cuando una sonrisa yacia en sus labios

Acarició sonriente el pecho de SU amado Ne-Chan para notar algo sonrojado los músculos bien tonificados que se le habían formado al contrario en el último tiempo... También su piel estaba algo diferente, un poco más morena... pero seguía siendo la piel que había acariciado hace tanto tiempo atrás y que se estaba volviendo loco por no tener entre sus manos... suave... tersa... increíblemente fresca y adictiva... así era todo lo que lo hacía ser SU dulce Nergal...


- Jejeje ¿Y esos músculos?... Sin duda son nuevos ya que tendría que estar muy loco para no recordarlos, my honey.... -

- puede que tenga nuevos musculos pero tambien nuevas heridas -

bostezaba sin darle importancia mientras sabia que mythos le habia curado incansables de veces las heridas de su espalda, sobre todo aquella larga cicatriz que aun persistia, su cuerpo seguia tranquilo ya limpio del semen y descargado, notando la calidez y la sensacion de tranquilidad que le daba estar cerca de my-chan. sonriendo dulcemente al bajar su mirada y luego subirla hacia el, acariciando el vientre tenso del medico

- tu tambien tienes demasiados musculos. me vas a hacer competencia Darling ?