Mas tarde y mas solo

Había salído muy tarde del prostibulo, uno de los ultimos clientes se había pasado de largo y ahora a consecuencia de eso debía vovler a su "casa" mas tarde de o planeado.
El reloj de una tienda sercana marcaba las 3:00am, y el cielo aun permanecia oscuro, ni siquiera estaba la Luna para alumbrarlo aunque fuera un poco, ya que esta estaba en la fase nueva y solo habían estrellas.
-detesto esto...lo detesto...-
Murmuraba mientras corria por los callejones oscuros, temblando lijeramente cada vez que escuchaba pasos o ruidos desconocidos a su alrededor.
Sentía como su cuerpo perdia energias repentinamente, obligandole a detenerse.
Se apoyo agitado contra una pared, se le había pasado la mano de esfuerzo y ahora le faltaba el aire.
<<Maldicion, maldicion, maldicion.>>
Pensaba mientras esculcaba en sus bolsillos para sacar su mascarilla de aire, sentandose unos momentos en el piso junto a un faról de luz tintineante en la acera de la calle.

-nergal apareció detrás de hiroki. ultitamente habia estado rondando mas las calles por algunos rumores y estaba en el coche con jordan para no elevar sospechas, cuando obligó al conductor a parar cuando hiroki se habia derrumbado, la preocupación estaba en su rostro, por lo que salió y se posició en frente del muchacho. colocó su mano en su frente, cerró los ojos y espero a que la temperatura saliera por si sola, mientras murmuraba-

tienes fiebre muchacho. ven te llevaré a la mansión

- sin que el chico se le opusiera, los brazos de nergal lo acunaron cuidadosamente, era la primera vez que tenia que mostrar tal cuidado con alguien pero los que le conocian sabian que era un hombre fiel a sus hombres al igual que frio con los traidores, colocó al chico en el coche-

jordan. a la mansion

Se sobresalto un poco al ver una figura asercarsele, poniendose tenso y mirando al principio asustado la figura que se acercaba, pero pronto volvio a estar "tranquilo" al ver que era una cara algo familiar, aunque no conociera mucho al joven Nergal le daba seguridad y tranquilidad ver que se trataba de el.
Trato de responder que no se preocupra, que solía tener fiebre y ademas había estado corriendo, pero aun no recuuperaba el aire y no tenía fuerzas para apartar la mascarilla de su boca, temblando lijeramente al tratar de hablar, sediendo a sus intentos al final. Cerro un poco los ojos al sentir la mano en su frente, a comparacion suya estaba fría, algo aliviador en aquellos momentos.

No esperaba tal accion por el mayor, sintiendo como era rodeado por sus brazos, acomodandose en estos un poco inconcientemente, sintiendose mas seguro ahora para ser alzado facilmente del suelo. Odiaba sentirse tan debil y fragil, le frustraba mucho, pero ahora ams que pensar en eso pensaba en como podría agradecerle la amabilidad del pelinegor, siempre lo había visto como alguien serio y frío.

-gra...gracias...-

Murmuro apenas audible cuando se encontro dentro del coche, apartando unos momentos la mascarilla de su boca para sonreír debilmente agradecido antes de volver a ponerse la mascarilla.

- guarda tu aliento para cuando sea necesario -

su voz sonaba suave en esos momentos intentando que en su rostro no se viera la preocupacion, siempre procuraba que aquellos por los que se preocupaba nunca dijeran de esa faceta escondida del cruel nergal, colocó sus dedos en su menton liso y con el olor tipico de la locion de afeitado, el olor dulzon de la misma embargaba el coche para sentir que el coche frenaba, sus dedos sujetaron sus cabellos con una goma y sus dedos almidonaron la tela de su camisa, arrugada pero impecable de manchas

- en la mansion hay una habitacion para ti -

esa era la unica palabra que se escuchaba, a pesar de que ambos eran observados por george quien ya conocia mas de sobra aquella faceta cuando el mismo habia sido salvado en ocasiones por nergal ahriman al que todo el mundo temia

No terminaba de creer que el mayor tubiera una fase tan amable, seguro la fiebre ya le estaba afectando al grado de hacerlo alucinar o algo parecido.
Decidio mejor descansar a darle mas vueltas al asunto, no tenía ganas de pensar mucho ne aquellos momentos, solo cerro los ojos y recargo la cabeza en el respaldo, tratando de acompasar su respiracion.
Pasados varios minutos pudo retirar al fin la mascarilla de su boca, guardandola cuidadosamente dentro del bolsillo de su chamarra, mirando por la ventanilla de vez en cuando cuando no tenía los ojos cerrados. Solo se giro a ver al joven Nergal al escuchar lo de la habitacion.
-¿una habitacion...para mi?-

Pregunto en voz baja aunque el otro le hubiera dicho que no hablara, no podía evitar sentir curiosidad.

- hm. no olvides que todos mis hombres estan en la mansión. me gusta tenerles cerca -

murmuró con los brazos cruzados no era hombre de dar
demasiadas explicaciones por lo que simplemente suspiró
y colocó sus manos en la ventanilla semi-abierta
su rostro en esos momentos se llenó de una brisa fria
que acarició su rostro, viendose el paisaje recorrer
el terreno

- además, mythos te revisará de nuevo por si puede ayudarte con esa tos -

-cierto...es que aun no me acostumbro...-

Hacía muy poco que la oportunidad de ser asesino se le había presentado, por lo tanto aun no terminaba ni de creerse este echo, incluso había veces en las que despertaba preguntandose si era verdad. Y lo era afortunadamente para el.
Ahora que lo pensaba aun no había llegado a ir a la mansion, despues del dia que el mayor le había entregado la llave de su cuarto en el hospital parecio olvidar este "detalle" continuando viviando donde hasta ahora lo hacía, culpa de la costumbre y la rutina seguramente.
Metió una mano dentro del bolsillo de su chamarra comprobando que llevaba la llave, sintiendo el metal frío de esta para despeus soltarla.
-espero si pueda ayudarme...le estaría muy agradecido..-

Respondio aunque mas para si mismo, mirando por la ventanilla las calles oscuras.

- el es el mejor de su profesion no hay herida que el no pueda curar incluso creo que la muerte le tiene miedo -

murmuraba hechando el humo del cigarrillo por la ventana mirando las luces pasar, colocando sus manos en su mejilla para luego mirar como el hospital se cernia en frente suya, con ese blanco que se atrevia a conquistar el mundo con ss logros, finalmente volvió a bajar del coche cogiendo a hiroki por el cuerpo, como habia hecho antes, sus musculos tensionados podian verse sujetando el cuerpo del chico de forma facil como si aquello no le importase nada y no le hiciera el menor daño, mientras subia las escaleras y sus hombres se encargaban de abrir la puerta y observar que no hubiera ningun atentado